Existen diferentes claves dentro de la forma en la que puedes configurar un fondo de ahorro para tu futuro. A la hora de buscar cómo consolidar ese capital complementario tu jubilación, no deberías centrarte exclusivamente en un único modelo. La idea es ser capaz de combinar ahorro e inversión.
Para algunas personas parece que ambas opciones, ahorrar e invertir, son excluyentes. Esto, realmente, en la mayoría de ocasiones puede considerarse como un error. En general, se considera que una cartera sana en el tiempo se configura con elementos de ahorro garantizado, de ahorro no garantizado y herramientas de inversión.
Aunque, temporalmente, se puede optar por balancear más una opción que otra, realmente en la combinación de todas estas opciones es donde se encuentra el éxito.
¿Cuándo conviene el ahorro y cuándo la inversión?
Hay que tener en cuenta que, ahorro e inversión, no son figuras incompatibles. De hecho, como veremos, pueden ser herramientas que bien utilizadas, se complementan y pueden ayudar a crear este colchón futuro de complementación de la pensión de jubilación.
En general se da por sentado que entendemos inversión como asunción de riesgo y ahorro como búsqueda de herramientas de menos riesgo para el usuario.
En este contexto, definir cuando ahorrar y cuándo invertir para la jubilación es relativamente sencillo:
- La inversión se realiza fundamentalmente cuando la distancia con la jubilación aún es larga, posibilitando aprovechar el interés compuesto, para crear un capital amplio, que, con el tiempo disponible, permita absorber incluso errores, fallos o pérdidas.
- El ahorro garantizado se aplica cuando el periodo de jubilación ya se acerca y el usuario no desea asumir riesgo sobre el capital que posee, dicho de otro modo, desea consolidar el ahorro.
No hay realmente un periodo de tiempo concreto en el cual se deba tomar una u otra decisión, de hecho, probablemente en la zona intermedia (edad adulta) del usuario lo más inteligente sea combinar una parte de ahorro garantizado con una parte de asunción de riesgo busca de mayor rentabilidad.
¿Cuál es el mejor momento para comenzar ahorrar?
En lo que la mayoría de analistas se ponen de acuerdo es que hay que comenzar ahorrar para la jubilación cuanto antes, cuánto más jóvenes, más nivel de riesgo a largo plazo puedes asumir, cuánto más tarde comienzas ahorrar asumir nivel de riesgo será más complejo.
Por ejemplo, una persona de 25 años que comienza su andadura profesional y que aún tiene una distancia superior a los 42 años para jubilarse, puede comenzar sin ningún problema a colocar su dinero en productos de inversión buscando niveles de rentabilidad elevados.
Sin embargo, una persona de 50 años, que nunca ha ahorrado previamente, no tiene el mismo margen de maniobra y deberá equilibrar de manera mucho más radical los niveles de riesgo y los niveles de garantía ya que, perder dinero con tan poco margen de maniobra puede entorpecer la búsqueda del capital necesario para complementar la pensión.