Conocíamos estos días algunos datos relevantes acerca de la evolución de los planes de pensiones, entre ellos, la la evolución en el pasado año de rentabilidades medias por encima del 5% o el crecimiento constante del patrimonio de estos productos en nuestro país. Es evidente que en los últimos años los planes de pensiones han adquirido cada vez más importancia, algo que no parece vaya a decaer en un futuro inmediato, sin embargo, a esta realidad le acompaña otra menos positiva; realmente sabemos muy poco acerca de nuestros planes de pensiones.
Durante el pasado año se presentaban varios informes en este sentido en los que podríamos advertir como, efectivamente, no conocemos en profundidad lo que nuestros planes vienen a ofertar, y, más aún, en muchos casos ni siquiera somos capaces de describir a grandes rasgos nuestros propios planes de pensiones contratados. Obviamente para empezar a conocer estos productos debiéramos ser capaces de distinguirlos según sus diferentes tipos.
¿Qué tipos de bonificaciones al traspaso de planes existen?¿Cuales son las más interesantes? en este post te lo aclaramos
Al tratarse de un producto con una enorme variedad de gama, lo cierto es que no existe una única manera de clasificar por tipos a los planes de pensiones, los modelos más habituales de clasificación serían los sigui
- según el carácter del plan
- según el tipo de inversión
- según las obligaciones generadas
Realmente cara al usuario medio son los dos primeros modelos de clasificacion los que con más frecuencia van a aparecer a la hora de la contratación, sin embargo, repasaremos los cuatro para un mayor nivel de definición.
Planes de pensiones según su carácter
En este apartado realmente vamos a distinguir no tanto el tipo de plan por lo que representa cara a los posibles resultados, si no por la forma que adopta y el modelo de usuario al que se dirige, ya que dependiendo de las categorías se enfoca hacia grupos muy concretos y diferentes entre sí. aunque podríamos distinguir más subgrupos dentro de las categorías realmente quedan bien definidos cuando acudimos a tres grandes grupos:
Planes de pensiones individuales |
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Planes de pensiones de empleo |
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Planes de pensiones asociados |
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En todos los casos el comportamiento de estos planes, cara al usuario, responde a los mismos parámetros y su utilidad es la misma, ahorro para complementar la jubilación.
Planes de pensiones según el tipo de inversión
En este caso estaríamos ante la clasificación más habitual, de hecho, prácticamente siempre que nos referimos a planes de pensiones los valoramos en función de su modelo de inversión, ya que, realmente, este es el que determina el resultado del producto.
Si tuviéramos que hacer una clasificación rápida de los planes de pensiones según su tipo de inversión nos encontraríamos con tres grandes grupos:
- Planes de pensiónes de renta fija
- Planes de pensiones de renta mixta
- Planes de pensiones de renta variable
Sin embargo, existen tal cantidad de posibilidades y variaciones que la anterior descripción se puede quedar corta cara al usuario, por ello, conviene ampliar la recogiendo algunas de las variaciones que estos tres grupos pueden llegar a tener, vamos a repasar los principales tipos de planes de pensiones según su modelo de inversión atendiendo a estas variaciones:
Planes garantizados |
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Planes renta fija corto plazo |
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Planes renta fija corto plazo |
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Planes renta fija mixta |
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Planes Renta variable mixta |
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Planes Renta Variable |
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Lógicamente, tal y como explicábamos, las posibles formas que estos productos pueden llegar a adoptar los hacen tan flexibles que incluso dentro de una misma categoría, pongamos por ejemplo la renta variable, las diferencias son tan sustanciales que pudieran parecer productos diferentes. Sin embargo, desde un punto de vista de clasificación, la división que hemos reflejado en el cuadro sería más que suficiente para comprender los principales modelos de planes de pensiones.
Otros tipos de clasificaciones
Existen otras nomenclaturas y modelos que pueden ayudar a definir los planes de pensiones, al comienzo del artículo citábamos por ejemplo la clasificación según las obligaciones generadas, este no es un modelo muy utilizado y desde luego no muy cercano al usuario, baste decir sobre el que se basa en la definición del modelo de aportaciones o de obligaciones que el producto genera, encontrando variaciones si por ejemplo las prestaciones quedan definidas de antemano, o si no quedan delimitadas hasta el final del proceso de capitalización del producto, incluyendo la posibilidad de una solución mixta en la cual existe una cuantía ya predeterminada de la prestación a percibir pero también una cuantía de las aportaciones a realizar.