Con la jubilación en Estados Unidos ocurre una cosa curiosa: no hay término medio. Tendemos a idealizarla en exceso o nos olvidamos de que es una parte importante de la vida de las personas. El hecho es que hay algunas cosas que nadie dice, y que deberías tener en cuenta el día de tu jubilación.
Son cosas que van más allá de las típicas relacionadas con el ahorro o la previsión. Tienen más que ver con aspectos cotidianos que a veces olvidamos.
Cada vez vivimos más, y las jubilaciones se alargan
Uno de los síntomas del bienestar social es que la esperanza de vida es mayor. Mientras que hace medio siglo la esperanza de vida media tras la jubilación apenas superaba los 14 años, hoy supera ampliamente los 20 años.
Además, el estado general de salud de los jubilados es cada vez mejor. Así que no sólo vivimos más tiempo, sino que también estamos más sanos.
En consecuencia, la jubilación es un periodo largo. Mientras que en el pasado podía ser un tercio, o menos, de la vida laboral, hoy puede ser más que la duración media de toda la vida laboral.
Los recursos dedicados son más caros, pero más eficaces
Si alguna vez se ha preocupado por la jubilación, probablemente ya habrá notado que cada vez hay más servicios especializados.
Se podría tender a pensar que esto es así en el ámbito de la sanidad, pero, en realidad, se aplica prácticamente a todo: desde servicios asistenciales, vivienda, ocio, cultura, turismo, servicios financieros, etc.
Los productos y servicios específicos para las personas mayores están inundando el mercado. Es una tendencia creciente que aumentará aún más en los próximos años.
Por término medio, estos servicios pueden ser más caros. Sin embargo, al mismo tiempo, no sólo ofrecen mejores prestaciones, sino también más seguimiento, control y opciones que los servicios generalistas.
La tendencia hacia las comunidades de ancianos es una realidad que ya podemos ver y experimentar en algunos estados como Florida.
La jubilación es una etapa de la vida cada vez más activa
Es cierto que en el pasado había una cierta tendencia a pensar en la jubilación como una especie de zona gris en la que descansar después de toda una vida de trabajo. Hoy en día, sin embargo, este descanso se ve de forma activa.
La jubilación es cada vez más cara. Una de las principales razones es que somos mucho más activos. La cultura, el ocio, el turismo, la alimentación y el bienestar son algunos de los gastos que han aumentado mucho en la jubilación en comparación con hace sólo 30 o 40 años.
Conviene tenerlo en cuenta. Se puede pensar que al jubilarse se entra en un periodo de la vida más barato. En realidad, no es necesariamente así; dependiendo de su nivel de actividad, puede ser incluso un periodo más caro.