Uno de cada tres pensionistas obtiene ingresos adicionales de planes de pensiones, seguros, productos financieros y alquileres.
El futuro de las pensiones está en el candelero. La ‘hucha de las pensiones‘ se acaba, su rentabilidad se encuentra bajo mínimos, el Gobierno plantea nuevas fórmulas y muchos ahorradores no saben cómo afrontar la cuestión. Sin embargo, aunque resulta conveniente tener en cuenta los tiempos venideros, también hay que considerar en qué momento se encuentran los jubilados. Es decir, ¿cuál es el presente de los pensionistas?
¿Cultura de la previsión frente al retiro?
Las carencias del sistema público de pensiones han hecho que, al menos desde finales del siglo pasado, se resaltase desde muchos ámbitos la necesidad de buscar ingresos extraordinarios. Como es lógico las entidades financieras, así como otros actores relacionados con los planes privados o productos similares, han hecho la mayor apología posible de esa iniciativa.
Perfil del pensionista en España
A pesar de lo cual, si se echa un vistazo a las estadísticas actuales sobre los pensionistas, resulta obvio que a esa cultura de la previsión frente al retiro le queda mucho camino por recorrer en el mercado nacional. De esta manera, el pensionista medio sigue presentando un perfil tradicional, poco desarrollado en cuanto a la combinación de ingresos si se hacen comparaciones con realidades colindantes respecto a países vecinos o del entorno.
La pensión pública como única fuente de ingresos
Así, el 70% de los jubilados en España tiene únicamente su pensión pública como fuente de ingresos, o lo que es lo mismo, siete de cada diez mayores de 65 años viven sólo gracias a aquélla. Este dato se convierte en todavía más relevante al añadir que el número de pensionistas está, a octubre de 2016, en 8.586.224, según los datos que ofrece la Seguridad Social.
Planes de pensiones y otros productos
En el otro lado del espectro se encuentran aquellos jubilados que buscan complementar la pensión pública. Éstos son uno de cada tres pensionistas, que obtienen ingresos adicionales de productos financieros (29%), planes de pensiones y seguros (22%) y alquileres (13%).
Pensiones bajas
En lo que se refiere a los importes que cobran los jubilados, cabe destacar que un 38% de los mayores de 65 años tiene unos ingresos inferiores a 750 euros mensuales, mientras que el 67% de las personas jubiladas que reside en su hogar percibe unos ingresos inferiores a 1.250 euros mensuales y hace frente a un gasto medio 953 euros al mes, y sólo un 6% supera los 2.000 euros mensuales.
La mayor parte de los ingresos se destina a vivienda y necesidades básicas. Luz, agua, gas, comunidad o teléfono, entre otros, consumen mensualmente el 31% del total del presupuesto (295 euros) y alimentación, ropa y productos de limpieza alcanzan el 35% (332 euros). A salud (seguros, medicamentos, dentistas, etc.) se dedican 104 euros al mes, mientras que los 171 euros restantes se destinan al ocio.
Más de la mitad de los pensionistas no llega a mileurista
Como es lógico, las personas que tienen más ingresos son principalmente aquellas que tienen fuentes de ingresos alternativas a la pensión pública, declarando un 57% del total unos ingresos inferiores a los 1.000 euros mensuales. Eso sí, el 77% convive con otras personas que, en muchos casos, también disponen de ingresos, reduciendo con ello al 20% el número de hogares con esa renta.
Jubilados en dificultades
Como consecuencia de las cantidades que perciben, el 45% de los pensionistas asegura que tiene dificultades para llegar a fin de mes, dado que, además, el 38% de los mismos presta ayuda económica a sus familiares, siendo el importe medio mensual de este apoyo de 51 euros.
La opción del ahorro
Además, un 22% del total cree que no dispondrá de suficiente patrimonio para cubrir sus necesidades futuras. Ante tal tesitura, un 56% de los jubilados prefiere ahorrar para poder hacer frente a imprevistos, mientras que el 40% señala que no puede hacerlo porque carece de ingresos suficientes y, por el contrario, un 4% prefiere gastar todos sus ingresos sin pensar en posibles contingencias.
¿Dejar en herencia o gastar?
Más allá de las contingencias, los mayores de 65 años también piensan en dejar un patrimonio a sus herederos. El 91% de quienes hoy están jubilados tiene una vivienda en propiedad, pero no dispone de otros ahorros en bienes inmuebles distintos a su residencia habitual, el 71% optaría por dejar todo su patrimonio a sus herederos y un 24% preferiría gastarlo y dejar solamente su vivienda habitual en herencia.
Las cifras ofrecidas son las principales conclusiones del estudio La revolución de la longevidad y su influencia en las necesidades de financiación de los mayores, ganador del XI Premio Edad&Vida, apoyado por la Fundación Edad&Vida, junto a VidaCaixa y Obra Social La Caixa. El trabajo ha sido elaborado por expertos de las universidades de Valencia, Extremadura y Castilla-La Mancha.
Pérdida de poder adquisitivo para los pensionistas
Como conclusión, los autores del citado documento avisan de que «el progresivo envejecimiento de la población plantea varios retos al sistema público de pensiones en la actualidad y en el futuro, dado que la revalorización anual de las pensiones será inferior al crecimiento de los precios, derivando en una importante pérdida de poder adquisitivo para los pensionistas en sus últimos años de vida».