Si desconoces los métodos para determinar si una propiedad está libre de cargas, este artículo será de gran interés para ti. Las cargas de un inmueble, ya sea una casa, un apartamento u otro tipo de propiedad, se refieren a los pagos pendientes que recaen sobre ella y que son transmitidos al nuevo propietario en caso de una compraventa.
Es por ello que al comprar una propiedad, es importante saber qué cargas podrían afectarla. ¿Cómo puedes determinar si una propiedad está libre de cargas? Y en caso contrario, ¿cómo se puede liberar de ellas?
Diferente tipos de cargas sobre las viviendas
Como mencionamos previamente, las cargas de una propiedad inmobiliaria son obligaciones financieras relacionadas con la misma que, si no se cumplen, afectan tanto al bien como a su propietario.
En resumen, si compras una casa sin asegurarte de que está libre de cargas, es posible que debas asumir los pagos pendientes. Existen varios tipos de cargas, entre las que se incluyen:
Cargas hipotecarias: los impagos de la hipoteca pueden llevar a la ejecución hipotecaria y, en última instancia, al embargo del inmueble si los pagos no se realizan.
Cargas fiscales: la propiedad inmobiliaria está sujeta a diferentes impuestos, como el IBI o la plusvalía municipal. Si no se han pagado las cantidades correspondientes al año anterior, como nuevo propietario, deberás abonarlas. En cuanto a los impuestos del año actual, el responsable es el propietario de la vivienda a fecha de 1 de enero.
Deudas con la comunidad de vecinos: las cuotas de la comunidad, derramas y otros pagos son responsabilidad de la propiedad, y se transmiten al nuevo propietario.
Estos son los tres tipos de cargas más comunes, aunque también podrías encontrarte con otras obligaciones que, aunque no se consideran cargas directamente, podrían afectar como propietario, como el impago de los suministros básicos, las servidumbres, los arrendamientos del inmueble o los embargos judiciales.
Descubrir si una casa está libre de cargas
Para asegurarte de que una casa está libre de cargas antes de comprarla, debes solicitar una nota simple actualizada de la finca en el Registro de la Propiedad. Este documento detalla las cargas administrativas, incluyendo embargos judiciales. Normalmente, el vendedor proporcionará este documento, pero si no es así, puedes obtenerlo fácilmente en el Registro de la Propiedad o en línea en el Colegio de Registradores, pagando una pequeña tasa.
En cuanto a las cargas vecinales, solo necesitas un certificado de la comunidad que indique su existencia o inexistencia. El vendedor debería proporcionarte este documento, y si tienes alguna duda, puedes contactar al presidente o al administrador de la comunidad.
En cuanto al IBI, una buena manera de verificar si la propiedad está libre de cargas es solicitar al vendedor el recibo del año anterior y acordar en el contrato de compraventa quién se encargará de pagar el impuesto del año en curso.